MISION DE CARABINEROS DE CHILE EN HAITI
 
 
Retorno del primer contingente de Carabineros integrante de Misión de Estabilización en ese país

Nuestro legado en Haití: profesionalismo, entrega y solidaridad
 
 
Revista de Carabineros, septiembre 2005
 
 
36 carabineros fueron parte de la Misión de Naciones Unidas para la Estabilización de Haití, desarrollando durante un año una reconocida labor de apoyo a la reestructuración de la policía de ese país, con el fin de restituir la seguridad pública y superar el caos político, social y económico que azota a la nación más pobre del continente.
En febrero de 2004 el Consejo de Seguridad de la O.N.U. resolvió crear la Misión de Naciones Unidas para la Estabilización de Haití (MINUSTAH) con el objetivo de devolver la paz y normalidad a este país que atravesaba una intensa crisis social y política, agravada por la extrema pobreza de sus habitantes, violencia de diversos grupos armados y violaciones a los derechos humanos.
La MINUSTAH, a cargo del Embajador chileno Juan Gabriel Valdés, como Representante Especial del Secretario General de Naciones Unidas en Haití, la integran tres unidades principales: una civil, que se encarga, básicamente a través de ONGs (organizaciones no gubernamentales), de velar por los asuntos políticos y humanitarios; otro componente militar, mantiene las condiciones de seguridad que permiten el desarrollo de los objetivos de la Misión; y la UNPOL, Policía de las Naciones Unidas (anteriormente denominada CIVPOL), fuerza compuesta por 1.300 policías (aprox.), provenientes de 35 países.
El Cabo 1º Arriagada visitaba frecuentemente a esta familia asolada por la pobreza extrema. En la foto junto a sus “regalones”.
Carabineros en apoyo a Haití
En este contexto, y con el objetivo de sentar las bases para la recuperación de Haití y la normalización de su proceso político y democrático, uno de los mandatos prioritarios de la O.N.U. es ayudar al gobierno de transición a restablecer el orden social y la seguridad pública de la nación, por lo tanto, al momento del origen de la Misión era urgente la reestructuración y profesionalización de la Policía Nacional de Haití, que se encontraba desarticulada y sumida en una profunda crisis.
El excelente desempeño de Carabineros en la Operación de Paz realizada en Bosnia-Herzegovina, a fines de los años 90, además de su reconocido prestigio internacional, fue determinante a la hora de solicitar a la Institución el apoyo en esta labor.
Fue así como en dos grupos, en agosto y septiembre del año pasado, 36 carabineros, entre ellos tres mujeres, arribaron a la capital haitiana, Puerto Príncipe, con el objetivo de colaborar en la reconstrucción de la paz y seguridad en Haití, dejando atrás padres, esposas e hijos durante un largo período.
Al arribar al país caribeño, todos concuerdan con que el panorama era desolador, especialmente en lo relativo a la pobreza, violencia en las calles, y la deplorable situación de niños y mujeres.
Luego de un tiempo de instrucción especial para formar parte de la UNPOL, fueron distribuidos en 8 ciudades y poblados diferentes, y además de su uniforme de carabineros debieron comenzar a usar la boina azul que distingue a esta Fuerza, junto a elementos de seguridad, como chaleco antibalas.
Estas eran las instalaciones del orfanato en que estos niños vivían. La imagen nos muestra el día en que recibieron sus primeros pupitres. Hoy gracias a la labor de la Cabo 1° Claudia López O. habitan uo especialmente construido para ellos.
Una nueva policía
Al mando estuvo el Coronel don Alejandro Yáñez Avila. Relata que como misión específica de la UNPOL, el Personal de Carabineros debió fiscalizar asistir y reorientar la estructura, organización y procedimientos de la Policía Nacional Haitiana (PNH); formar, dirigir y supervisar unidades y funciones especializadas, como S.W.A.T (parecido a Fuerzas Especiales), realizar labores de investigación criminal, protección a la infancia y a mujeres; colaborar en el reclutamiento, selección y formación de sus nuevos integrantes; evaluar las amenazas al Orden Público, alertando y guiando a las autoridades locales y policiales para adoptar operativos adecuados; apoyar y fiscalizar a la PNH en el desarrollo de sus actividades como una institución eficiente y eficaz; colaborar con programas de desarme y desmovilización de grupos políticos y delictuales, e instruir el curso de preparación que se realiza a las policías extranjeras que se suman a la UNPOL, entre otras tareas.
En ello, el Coronel Yáñez Avila es enfático en recalcar que todas las funciones se realizaron bajo los lineamientos de la O.N.U., cumpliendo con los estándares internacionales de respeto a los derechos humanos y asegurando que la función de la Policía Nacional de Haití fuera acorde a los procesos democráticos.
Todo lo anterior fue vital en el lento proceso de desarrollo político de la nación. Actualmente, Haití se encuentra al mando de un gobierno de transición. En este sentido, la O.N.U. ha fijado como objetivo la realización de elecciones democráticas a fines de 2005, por lo que desde hace unos meses se ha estimulado la inscripción electoral de la ciudadanía, lo que se ha tornado bastante difícil, debido a que la nación no cuenta con un sistema de registro de identificación, el cual también se está creando.
En esta tarea, Carabineros y las policías integrantes de la MINUSTAH han debido velar por el desarrollo de estas iniciativas, tratando de incentivar en los haitianos una cultura cívica.
Parte de la dotación de Carabineros que cumplió funciones en Haití, foto junto al General Director, don Alberto Cienfuegos, y el Embajador chileno ante la la O.N.U., y Representante Especial del Secretario General de Naciones Unidas en Haití, Juan Gabriel Valdés.
Haití en cifras
• 8, 5 millones de habitantes (estimado).
• El 76% de sus habitantes vive en condiciones de pobreza.
• El 55% se halla en condiciones de pobreza extrema (menos de 1 dólar al día = 540 pesos chilenos aprox.)
• Esperanza de vida al nacer: 49, 4 años.
• Tasa de natalidad ( hijos por mujer): 4
• 1 de cada 10 de los niños mueren antes de los 5 años.
• Tasa de alfabetización (mayores de 15 años): 51.9%.
• 35,5% de la población ha completado su educación básica.
• Líneas de teléfono fijo: 16 por cada mil habitantes.
• 200 mil niños están huérfanos a causa del SIDA.
• Tasa de desempleo: 70%.
• La Policía Nacional de Haití posee entre 2 mil y 3 mil hombres, pero no se conoce el número exacto.
• Haití fue el primer país de Latinoamérica en independizarse, en 1804. Paradójicamente, a lo largo de su historia política han primado los gobiernos dictatoriales.
*Nota: Cifras aproximadas.
Fuente:
• Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas.
• Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo.
• “Reporte Sobre los Derechos Humanos en Haití”, presentado por Bill Quigley a la Asociación Internacional de Abogados Democráticos.
Protagonistas de la esperanza de un futuro mejor
Coronel don Alejandro Yáñez Avila, al mando del contingente en Haití
Relata que su experiencia anterior en la Operación de Paz en Bosnia-Herzegovina fue fundamental, tanto profesional como sicológicamente, para integrar y comandar el contingente de Carabineros en Haití, el que califica como un grupo humano excepcional.
Pese a que se distribuyó al Personal en 8 localidades, por lo que la mayoría trabajaba en equipos independientes “me enorgullece decir que no había necesidad de fiscalizar su labor, ya que supieron trabajar en forma autónoma, comprometida y responsable. Ello se debe en gran parte a nuestra formación institucional, basada en el rigor y la disciplina. En mi condición de Jefe de este contingente, constantemente recibía halagos por el trabajo de los carabineros, que, aunque realizaban distintas labores, sobresalieron por su cumplimiento más allá de lo exigido, además de su extraordinaria capacidad de acercamiento comunitario”. En este aspecto, destaca la calidez de Carabineros, los cuales eran reconocidos por sus muestras de cariño, especialmente con los niños.
Además de encabezar este grupo, el Coronel Yánez se desempeñó en el Cuartel General de la UNPOL, en Puerto Príncipe, como Jefe de Unidades Antidisturbios (especie de Fuerzas Especiales) a nivel nacional, a cargo de más de 600 policías de cinco países. Relata que por la realidad del país, estas fuerzas especializadas son fundamentales en la mantención del orden. “Nuestra metodología de trabajo como carabineros nos sirvió mucho en este aspecto, ya que poseemos los conocimientos y experiencia en el área de administración de policía”.
Encabezando una ceremonia junto a la Policía de Jordania. “Es muy enriquecedor poder compartir con otras culturas”, relata el Coronel don Alejandro Yánez Avila.
Por ello cree, como evaluación del desempeño de Carabineros, que aportaron a crear un clima más tranquilo en Haití, ayudando a detener a grupos armados, recuperando espacios públicos, formando y reestructurando la Policía Nacional de Haití, brindando las condiciones de seguridad para la labor de las O.N.Gs, aunque reconoce que todavía falta mucho.
También rescata la excelente relación entablada con el Embajador Juan Gabriel Valdés; con el Embajador en Haití, Marcelo Young, y en general con todos los integrantes chilenos de las Fuerzas Armadas, las ONGs, y de organizaciones gubernamentales e internacionales. “Realmente nos unimos en una comunidad solidaria en el exterior, enfrentando nuestra labor como un tema país”.
Lo que también ayudó al éxito de esta misión institucional fue la positiva gestión del al Coronel Yánez, según palabras del Personal a su cargo: “Es un líder innato. Fue nuestro vínculo con Chile, siempre preocupado de nuestro aspecto emocional y de mantener al grupo cohesionado, aunque estuviéramos diseminados en distintos lugares”.